Un jurado compuesto por la cineasta Lucrecia Martel, el escritor y editor Héctor Guyot, la dramaturga, directora y actriz Mariana Chaud y el escritor Luis Sagasti seleccionará proyectos de narrativa de ficción y no ficción, guion y dramaturgia.
Nota publicada en La Nación el miércoles 2 de julio de 2025. Leer nota completa
Ya está en marcha la sexta edición del Premio Estímulo a la Escritura “Todos los tiempos el tiempo”, en el que concursan obras en desarrollo de autores de 20 a 40 años, argentinos y residentes en el país, en cuatro categorías: narrativa, narrativa breve, guion y dramaturgia. La convocatoria permanecerá abierta hasta el 31 de agosto. El certamen ideado en 2020 por Fundación Bunge y Born, Fundación Proa y LA NACIÓN este año entrega cuatro premios de $ 1.800.000 cada uno.
El fallo del jurado se conocerá a finales de noviembre. También se otorgarán ocho menciones especiales a los proyectos más destacados.
Ganadores y “mencionados” podrán participar de las clínicas de escritura, a cargo del escritor mexicano Álvaro Enrigue y la escritora Virginia Cosin.
“Me interesa muchísimo la gestión de una obra, observar el proceso de armado, de alumbramiento de lo que luego será una obra acabada -dice Sagasti a LA NACIÓN-. De modo que es un privilegio ser testigo de esa instancia y, claro, una gran responsabilidad evaluar aquello que se encuentra en estado de ciernes”.
Para Chaud, el premio ocupa un lugar necesario y fundamental para acompañar y difundir obras de artistas. “Siempre resulta motivador leer materiales nuevos que abran un espacio a la reflexión, a la imaginación, a la relectura -destaca-. Me dan muchas ganas de entrar en diálogo con otros creadores para poder eventualmente hacer crecer sus textos”.
Cosin encuentra atractivos varios aspectos del certamen. “Comenzando por la palabra estímulo: pienso en el empuje que necesita un brote floral para abrirse al mundo y, por otro lado, en la posibilidad siempre enriquecedora de los cruces, el intercambio y el contagio entre disciplinas -señala-. Asistir a la aparición de nuevos mundos imaginarios, auscultar los proyectos elegidos y acompañar en la búsqueda del pulso particular de cada texto es para mí un placer y también, por qué no, un gran estímulo”.
Desde su creación en 2020, el premio se consolidó como un espacio de referencia para el acompañamiento y proyección de autores en la etapa temprana de su producción literaria. El objetivo fundacional es alentar el desarrollo de nuevas voces y narrativas.
“Estamos nuevamente reunidas las tres instituciones para seguir adelante con el premio -dice la directora de la Fundación Proa, Adriana Rosenberg-. Esta alianza es firme y valora especialmente la originalidad y el estímulo a la creación. Este año contamos con un nuevo coordinador de amplia trayectoria, Andrés Beláustegui […] y con un jurado de primer nivel, que podrá analizar y evaluar con gran interés los proyectos en desarrollo, considerando todas sus potencialidades. Estamos muy conformes, contentos y con mucha ilusión”.
Iván Petrella, director de Cultura y Ciencia de la Fundación Bunge y Born, resalta que el premio es “también un reflejo de lo que queremos para el país: cooperación entre instituciones para consolidar un proyecto duradero en el tiempo, inversión y estímulo para jóvenes talentos, y una apuesta al futuro, una apuesta que siempre ha salido bien”.
